
¿Qué tal chicas?, yo ya estoy intentando volver a la normalidad tras las vacaciones, y digo intentando porque cuesta un montón coger el ritmo de las rutinas.
Bueno, os contaré que estuve en Viena, a ver a mi hija, y por supuesto le llevé el quilt y el álbum, y como era de esperar ¡le encantó!, bueno... pobre mía!, se le escaparon unas lagrimillas cuando vió el álbum... y es que estaba cargado de fotos de momentos especiales para ella... bueno... le gustó, le emocionó,... y eso es lo importante.
Por otro lado, yo... me fuí de aquí con algunas direcciones de tiendas de Patch y de Scrapbook para poder comprar "lo que fuera"... ¡no!, es broma... bueno, no sé,... porque con eso de que llevo tiempo sin ir a Festivales de Patch y salidas fuera de Cartagena, te dá como "ansiedad" saber que vas de viaje y tienes la posibilidad de encontrar tiendas, varias, muchas.... jajaja!!!, de lo que te gusta, supongo que algunas me entendéis..., en fin... que yo anoté lo que pude encontrar por la red, ... que fue poco...., y en alemán... para más narices....¡vamos! que era ir un poco a jugármela..., así que os cuento un poco de mi viaje...
Si tenéis la posibilidad de viajar a Viena,... hacedlo, no lo dudéis, es una ciudad encantadora, monumental, acogedora....tienes el ambiente y bullicio de una gran ciudad y también el encanto de los rincones, maravillosos palacios, impresionantes museos, ...
por supuesto, yo quería ver los palacios de Sissí... mis lecturas favoritas de mi adolescencia... ya sé que la pobre mujer no fue todo lo feliz que revelaban esos libros que yo leía, pero me hacía mucha ilusión pasear por los jardines y ver los palacios... así que allí fuimos, al palacio de invierno, y al de verano... que, la verdad, está uno casi al lado del otro..., supongo que el de verano lo hicieron donde tenían la posibilidad de tener aún más jardines... debajo véis el de verano por la parte delantera....
y esta es la vista posterior... ¡immensos jardines con montones de fuentes y algunos lagos!. A Sissí la llevaban todos los días a desayunar a lo alto de la colina.... ¡no sabía nada ella!, allá.... al fondo...
te pongo una foto de más cerca ...., tenía buen gusto la chica.... ¡menudas vistas habían allí!...

Paseando por la zona del palacio de invierno, que está en pleno centro de la ciudad, me encontré con una tiendecita monísima de PETIT POINT. Hacían tanto grandes trabajos como miniaturas. Los cuadritos que véis medían unos 6cm. , y los había aún más pequeños... ideales para casitas de muñecas... ¡pero menudos precios!, claro que llevaban mucho trabajo... pero ¡corcho!,....,yo estuve un buen rato admirando tantas maravillas...¡trabajazo donde los haya!, me acordaba de Belén, la seño de minis de Primores... a ella le habrían encantado...
También estuvimos por las zonas comerciales, donde estaban las maravillosas pastelerías, llenas de bombones, tartas impresionantes, por supuesto la Tarta Sacher... deliciosa..., y montones de cajitas llenas de no-sé-qué... porque lo que a mi me gustaba eran las cajas!,... son mi perdición.... lo sé..., mira qué monas...., decoradas con florecitas, mariposas.....
Este edificio que ves, es el ayuntamiento. Maravilloso. Aquí siempre hay alguna movida para la gente. Este mes de Agosto han puesto delante una gran pantalla de cine, con sus montañas de sillas, en donde proyectan cada día la película de una ópera. Todo gratis, por supuesto. Al rededor hay montones de puestos de comida internacional donde poder invitarte.
Estuvimos paseando por el Prater, que es un gran parque de atracciones al lado del Danubio (inmenso, grandioso, por cierto). Está abierto hasta las 12 de la noche.
Tiene la noria más antigua de Europa
y está rodeado de inmensas zonas verdes con sus lagos y bosques para pasear, hacer deporte, perderse...¡que gustazo!
por supuesto no nos podíamos ir de Viena sin asistir a uno de los muchos concietos que dan. Coincidiendo con el cumple de mi maridito, estuvimos en "La Sala Dorada" del Musikverein , donde se celebra el Concierto de Fin de Año de la Filarmónica de Viena, que se retransmite a todos lo países.
¡lo que me acordé de mi amiga Isabel Vera y sus hijos, y de la hija de M.Jesús!, que son músicos... ellos lo hubieran disfrutado a tope, seguro...bueno... esto OS LO RECOMIENDO...., sin palabras.... maravilloso....
en esta zona estábamos sentados nosotros.... al lado de los músicos...rodeados de mil chinos....
otro sitio que no nos podíamos perder era el Palacio Belvedere, por supuesto con inmensos jardines y fuentes... estuvimos admirando la obra de Klimt... impresionante....
vista desde el palacio Belvedere hacia la ciudad.
Otro día estuvimos en las afueras de la ciudad, visitando los HEURIGER, o antiguas tabernas vienesas. En ellas sirven comida típica vienesa y vinos de cosecha propia. Están decoradas con montones de flores, y encima de la puerta cuelgan ramas de pino silvestre como señal de que está abierta.
Por supuesto, como en toda europa, la bicicleta se impone cada vez más, ¡viva la ecología!
Bueno, pues también hubo tiempo de buscar las tiendas que os comenté. Y tengo que decir que me costó lo suyo encontrar algo. Pero yo no iba a darme por vencida.... y, en plena calle de tiendas MARIAHILFER STRASSE, me encontré con una tienda de telas, aunque no en exclusiva de Patch, pero que tenían un buen surtido y también tenían mercería, la tienda se llama KOMOLKA. Compré unas telas básicas, a muy buen precio, pues quiero hacer un quilt de unos barcos.
En cuanto a las tiendad de Scrapbook, encontré una estupenda PIPILONIA, y también hay papelerías donde encuentras bastantes cosas, pues allí cuidan mucho el tema de los regalos. Tienen montones de papeles preciosos para envolver, con montones de lazos y cintas a juego, y todo tipo de adornos para regalar. Una de esas librerias es MILLER.
Como cosas curiosas, paseando por la ciudad, nos encontramos con una obra que tenía puestos unos andamios y vigas de madera, y las señoras de una de las tiendas se ocuparon de decorar estas vigas haciéndoles unas fundas tejidas con lanas de colores.... ¡no me digáis que no están chulas!, y abrigadas, y llamativas, pues todo el mundo se paraba a verlas, y de paso ver la tienda, en la que, entre otras cosas, vendían lanas, ¡claro!